10-08-2019, 10:11 PM
Hola de nuevo Rovenant.
Me ha resultado curioso lo que has comentado sobre la linealidad.
Ciertamente, no puedes evitar la linealidad. Es la condición de todo librojuego (y libro en general). Ello no quiere decir que una obra sea más o menos previsible, pero es quizá una de las principales diferencias con los juegos de rol, en los que la cabeza pensante, maquiavélica y constantemente actualizada del narrador se amolda a las decisiones más espontáneas de los personajes/jugadores.
No olvidemos que lo que estamos creando aquí no deja de ser hiperficción explorativa, por lo que aunque hayamos dispuesto opciones múltiples, todos esos caminos ya han pasado por tu cabeza (esto es, que el lector establece los nexos, pero no construye la historia contigo como autor, sino que pasea por ella eligiendo los caminos que tú has dispuesto anteriormente), a diferencia de los juegos de rol puros en los que la intervención de los jugadores SÍ puede llegar a romper tus esquemas y terminar en algo que no habías ni escrito ni previsto (esto es, que los participantes construyen la historia contigo, pudiendo crear realmente sus propios caminos).
La linealidad es la esencia del librojuego, sea esta más compleja o sencilla, esté camuflada o no. Esto no deja de ser literatura, y cada opción múltiple sigue creando una línea narrativa, independientemente de si se bifurca a posteriori. A no ser que tengamos conceptos distintos de lo que es la linealidad, claro.
Me ha resultado curioso lo que has comentado sobre la linealidad.
Ciertamente, no puedes evitar la linealidad. Es la condición de todo librojuego (y libro en general). Ello no quiere decir que una obra sea más o menos previsible, pero es quizá una de las principales diferencias con los juegos de rol, en los que la cabeza pensante, maquiavélica y constantemente actualizada del narrador se amolda a las decisiones más espontáneas de los personajes/jugadores.
No olvidemos que lo que estamos creando aquí no deja de ser hiperficción explorativa, por lo que aunque hayamos dispuesto opciones múltiples, todos esos caminos ya han pasado por tu cabeza (esto es, que el lector establece los nexos, pero no construye la historia contigo como autor, sino que pasea por ella eligiendo los caminos que tú has dispuesto anteriormente), a diferencia de los juegos de rol puros en los que la intervención de los jugadores SÍ puede llegar a romper tus esquemas y terminar en algo que no habías ni escrito ni previsto (esto es, que los participantes construyen la historia contigo, pudiendo crear realmente sus propios caminos).
La linealidad es la esencia del librojuego, sea esta más compleja o sencilla, esté camuflada o no. Esto no deja de ser literatura, y cada opción múltiple sigue creando una línea narrativa, independientemente de si se bifurca a posteriori. A no ser que tengamos conceptos distintos de lo que es la linealidad, claro.